Los olvidados (1950)

Hace más de 50 años esta película causó indignación, hoy es Patrimonio de la Humanidad.

    Una obra maestra en todos los sentidos, y en donde hay que reconocer que Luis Buñuel, ha sido sín lugar a dudas uno de los más importantes (por no decir el más), directores de habla hispana, y esta película le volvió a colocar en la élite internacional. La película está basada en hechos reales y Buñuel la croescribió con el hombre que quizá haya sido su mejor aliado durante su exilio en México, me refiero al extremeño Luis Alcoriza, que trabajaron juntos en cerca de una docena de largometrajes. La historia pués, arranca con unas imágenes de varias ciudades, como queriendonos decir el maestro de Calanda, que esta historia podria ocurrir en cualquier otra ciudad, y en donde la cámara se posa en un barrio marginal de la ciudad de México, y en donde un tal Jaibo un chaval que se ha escapado de un reformatorio se reune con otro amigo llamado Pedro. Y es entonces cuando verdaderamente empieza esta historia de seres marginados, que no conocen ni el cariño ni la bondad de nadie... Extraordinaria, una obra maestra a todas luces, y es que D. Luis, no pudo retratar esta historia con tanto realísmo, tanta pasión y tanta tensión, como aquí lo ha hecho. Madres que odian a sus hijos, hijos descarriados y al final convertidos en asesinos. Unas escenas verdaderamente desgarradoras, de verdad, pero también impagables por su increible realísmo. Cuenta con una fotografia en blanco y negro, sencillamente perfecta, reforzando aún más esta impactante y dura historia, gracias tambien a la labor del gran Gabriel Figueroa. Muy bien todos los actores, la mayoría desconocidos, pero metidos tanto en sus personajes que te hacen de vivir e incluso morir con ellos, sobre todo Roberto Cobo (Jaibo) y Alfonso Mejía (Pedro), metidos en la piel de esos olvidados (aunque también hay muchos más), sín ningún presente y lo que es peor sín ningún futuro. En definitiva, una extraordinaria película, y en donde el genial Buñuel nos hace un auténtico documento de una historia cruda y desgarradora, pero lo que más rabia da, y es que por desgracia y por mucho que se quiera y que se diga, esto siempre existirá, en este mundo donde nos ha tocado vivir.

Matrícula de Honor.

Como anécdota, en un principio la proyección de esta película se suspendió en México a causa de la ola de protestas que provocó. Pero después de haber sido premiada en Cannes, volvió con éxito a las pantallas y ganó 11 de los premios atribuidos por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias.